2 de Noviembre
SER OPTIMISTAS: Quienes nos hemos salvado de la Autodestrucción, sabemos que cualquier situación por menos prometedora que parezca, significa un avance en nuestro Desarrollo Espiritual, ya que las buenas experiencias se disfrutan plenamente y las malas sabemos que nos enseñan algo que necesitábamos saber en esa etapa de nuestra Vida.
REFERENCIA: Con dinero y sin dinero; con Amor y sin Amor; con Salud y en la Enfermedad; con Trabajo y sin Trabajo; nuestra Esperanza que nace del Corazón nos Permite Intuir que lo Mejor Está Por Venir, así que sonriamos a la Vida.
REFLEXIÓN Y FRASE DEL DÍA:
¡Todo lo que se desconoce produce expectación,
pero cuando se le conoce a veces causa desilusión
porque la Mente antes de conocer forma una ilusión
ocasionada por el deseo o por la natural insatisfacción!
¡A ambos estados no se les dirige
todo el tiempo con Intuición
ya que todo puede darnos en un instante
una verdadera satisfacción
pero a esta no la consideramos
cuando no corresponde a esa pretenciosa ilusión!
¡Esa es la razón por la que no reconocemos
la verdadera satisfacción y aparece la frustración!
¡Todo es como es y no se le necesita dar otro interés!
¡Entonces no es necesario crear en la Mente lo que ya es,
porque tal y como es podemos vivenciarlo y valorarlo después
y en muchos casos es más satisfactorio de lo que imaginamos antes!
¡En la Vida necesitamos aceptar únicamente nuestra necesidad
y desechar lo que el deseo nos hace creer que podemos encontrar
porque el deseo nos distrae y no nos permite cada momento disfrutar
y todo el tiempo nos incita a querer algo más de lo que ya pudimos lograr!
¡La Vida nos ofrece muchos instante donde podemos participar
y tal participación incluye la disposición para saber esperar
y entonces cada momento presente si lo podemos disfrutar
sintiendo y valorando todo lo que la Vida nos puede regalar!
¡Esa disposición también necesita de toda nuestra atención
para poder elegir lo que nos dé una verdadera satisfacción
y para Meditar que cada instante es una diferente situación
y gracias a eso tendremos siempre una variada delectación!
¡Cuando convivimos hay fallas nuestras y de la gente
y por eso ya no aprovechamos el momento presente
porque no deseamos que nuestra pretensión se afecte
y por esta no apreciamos lo que hay en cada instante!
¡Durante la Vida siempre nos formamos diversas expectaciones
que pueden ser muy emocionantes quitándoles pretensiones
y sabiendo esperar hasta que se presenten las oportunidades
gozaremos plenamente la satisfacción de nuestras necesidades!
¡El deseo siempre nos lleva a buscar más placeres
quizá por temor de que no siempre se pueda obtenerles
y aún que ya tengamos satisfechas nuestras necesidades
el deseo no nos deja valorar nuestras obtenciones!
¡Además, es verdad que la Vida no todo el tiempo ofrece opciones,
pero si sabemos valorar y aprovechar las que llegan tenemos delectaciones
y estas nos proveen felicidad para continuar con otras necesidades
y de esa manera el deseo se desvanece y no engendra falsas expectaciones!
¡Cuando somos niños tenemos expectación por cosas infantiles
puede ser la navidad, los dulces, las diversiones o tener juguetes
y cuando ya los disfrutamos disminuyen nuestras expectaciones,
pero si demoran en llegar nuestras expectaciones son mayores!
¡Al llegar a la adolescencia tenemos expectación por diversas cosas materiales
sin tomar en cuenta muchas veces si pueden satisfacer nuestras necesidades
ni tampoco se considera si tenemos los recursos económicos para obtenerles
y por ello en infinidad de casos se pueden presentar algunas frustraciones!
¡Igualmente, en la edad adulta esas expectaciones se presentan,
pero con una mayor avidez si acaso todavía no se disfrutan
y en un estado de constante frustración los deseos angustian
y pueden llevarnos a tener excesos que fuertemente incitan!
¡Todo en la Vida se puede esperar con verdadera Emoción
sólo es necesario rechazar el prejuicio y la pretensión
que nos hacen ignorar, devaluar y desechar cada opción
presentada a nosotros para encontrar en ella una satisfacción!
Job Moderno
Tomado del texto "Expectación" que aparece en el libro "Así en la Tierra como en el Cielo" (Volver a la Inocencia).