10 de Febrero
DECIDIR QUIÉN DIRIJA NUESTRA VIDA, DIOS O EL EGO: Dios se manifiesta a través de nuestros más limpios Sentimientos: el Amor y la Ternura; así como en nuestra Consciencia con sus intrínsecas facultades: Intuición, Inteligencia, Imaginación, Creatividad, Memoria y Discernimiento. Los cuales, nos permiten sentir dentro de nosotros Paz, Amor, Alegría, Felicidad y Armonía. El Ego se muestra por medio de Soberbia, Resentimiento, Culpa, Miedo e Ira, originados por prejuicios, creencias y actos de mal juicio propios y ajenos. Estos, nos hacen sentir dentro de nosotros: Intranquilidad, Miedo, Frustración, Tristeza y Discordia
REFERENCIA: Necesitamos decidirnos por lo que nos dé mejores resultados, ya sea practicar el Bien o el Mal. Nosotros somos los únicos responsables de las consecuencias de nuestros propios actos. Así que, lo más útil es dejar de evadirnos y no culpar al Diablo por todos nuestros actos de mal juicio.
REFLEXIÓN Y FRASE DEL DÍA:
¡El odio es la ausencia de Amor!
¡La falta de Amor provoca que exista temor!
¡La avaricia aparece cuando al deseo lo dirige el temor
y la lujuria es el exceso en los placeres para aplacar dicho temor!
¡La ira surge cuando los deseos no encuentran un satisfactor!
¡Con temor e ira se siente frustración, ansiedad y un gran vacío interior!
¡Entonces, al tratar de llenar ese vacío aparece la compulsión,
pero de esa manera jamás podrá llenarse y siempre surgirá la ofuscación!
¡El temor, la ira y la ofuscación incitan a que la envidia haga su aparición!
¡Cuando existe la envidia, el deseo se vuelve una obsesión!
¡Por esa obsesión no se pone en otras necesidades atención,
se pierde el tiempo pensando, se deja de actuar y así llega la desanimación!
¡Debido a la frustración, a la ofuscación y la desanimación, la pereza hace su aparición!
¡Y por la pereza nunca se hace algo que produzca animación!
¡En ese círculo de inmovilidad el Amor no tiene participación!
¡Por eso no hay Felicidad que se logra cuando la necesidad obtiene su real satisfacción!
¡Cuando existe la Felicidad también concurre la Tranquilidad,
pero a la Tranquilidad casi nunca la sabemos valorar
y por no Meditar que es una trascendental necesidad
al estar tranquilos el miedo nos hace creer que algo malo va a pasar!
¡Entonces, a la Felicidad cuando se obtiene se le deja escapar
y cuando no se le tiene se le añora y se anhela su bienestar!
¿No será totalmente inútil vivir con esa manera de pensar?...
¿Si nos percatarnos de ello por qué el orgullo la trata de justificar?...
¿Es porque el orgullo proviene de la Tranquilidad
que sabe que tarde o temprano la volverá a disfrutar
o el orgullo intenta al miedo y la frustración ocultar
para que su malestar no pueda llegar a lastimar?...
¡De cualquier manera el orgullo todo el tiempo se puede manifestar
y convertirse en soberbia que también se llega a mostrar
cuando el Amor y la gente se llegan a olvidar o rechazar
debido a la autosuficiencia que hace creer que no se van a necesitar!
¡Tampoco se da Amor al Mundo sólo porque una persona nos pudo lastimar
y el rencor en los actos hacia la gente es lo que usualmente se llega a mostrar!
¡Al mismo tiempo, si no existe la Certeza que motive la Voluntad para actuar
entonces en la Vida el temor, la angustia y la preocupación llegan a abrumar!
¡Después, la avaricia causada por el temor
de que los objetos de placer se lleguen a acabar
motivan para actuar egoístamente sin ver alrededor
las consecuencias que se puedan presentar!
¡De esa manera los excesos, vicios y muchos actos de mal juicio
se llegan a demostrar
y el miedo, la soledad, la tristeza, la frustración, la conmiseración
y la depresión, suelen agobiar!
¡Por ello, aparece nuevamente la pereza que no permite nada conquistar,
pero la envidia siempre instiga a desear lo que otros han podido lograr
y si el miedo, el rencor, la avaricia, la pereza y la envidia llegan a guiar
cuando las verdaderas necesidades o los deseos se tratan de alcanzar
entonces se piensa y actúa con mal juicio, y a uno mismo y a la gente se va afectando,
ya sea criticando, mintiendo, intrigando, envidiando, peleando, robando,
descuidando, lastimando, secuestrando, chantajeando, y engendrando
deseos de venganza, miedo, odio y resentimiento que al Mundo han estado separando!
¡Hay quienes dicen que el Diablo es quien permite todo eso manifestar,
pero no existe tal ente, todo lo ocasiona nuestra manera de pensar y actuar!
¡Lo que sí es verdad es que hay una Fuerza que anima nuestra Voluntad!
¡Esa Fuerza es la Energía Universal que impulsa nuestro Espíritu a hacer el Bien, este es el Amor!
Job Moderno
Tomado del texto "Coctel diabólico" que aparece en el libro "Así en la Tierra como en el Cielo" (Volver a la Inocencia).